En la Naturaleza: Los elefantes son animales socialmente complejos, profundamente inteligentes y vigorosos. Se organizan en manadas de varias docenas de miembros estructurados generalmente alrededor de un matriarcado. Viven en una red social amplia que va más allá del vínculo madre-cría para incluir familiares, familia lejana, grupos, clanes, toda la población, incluidos los varones adultos, e incluso extraños. Esta vida altamente gregaria lleva los animales a comunicarse entre sí ante todo a través del tacto y del olfato. Los elefantes son nómadas, viven en amplios territorios y pueden recorrer entre 20 y 50 kilómetros en un solo día. Los elefantes están en contacto con el agua tan frecuentemente cómo les es posible. Beben a menudo y en cantidades copiosas (de 80 a 160 litros por día). El agua también tiene un papel importante en sus vidas sociales y su acicalamiento. Adicionalmente, los baños de barro y de polvo los protegen de parásitos y del sol. Pasan en movimiento 20 horas al día, explorando su ambiente, buscando alimento, socializando, cuidando de sus crías y buscando compañeros. Los elefantes son sumamente inteligentes, disponen de capacidad para utilizar herramientas, una larga memoria, e incluso lloran la muerte de sus compañeros.
En cautividad: Los elefantes no pueden adaptarse a la vida en cautividad donde su existencia natural se ve afectada a todos los niveles. El transporte, las condiciones de vida, el aislamiento social y el entrenamiento, tienen graves efectos físico-psicológicos sobre ellos. Los elefantes que viven en cautividad no tienen la oportunidad de recrear su vida social, puesto que se suelen mantener solos o en grupos pequeños y artificiales. Suelen pasar la mayor parte del día en remolques, en pequeños cercados electrificados o encadenados por sus patas, con su libertad de movimiento severamente limitada y en ocasiones apenas capaces de andar un paso o dos. Sus niveles diarios de ejercicio se ven considerablemente reducidos. Muchos sufren, incluso mueren, de infecciones en los pies y de problemas en sus articulaciones. Y muchos están infectados de Tuberculosis, que es contagiosa a las personas. Es frecuente observar elefantes meciéndose, balanceándose y sacudiéndose constantemente (comportamientos estereotípicos) enloquecidos por la falta de libertad y de cosas para hacer.
En la naturaleza: Los leones son animales altamente sociales que viven en grupos de entre 2 y 20 individuos. Son animales muy gregarios y se muestran activos por la noche, mientras que durante el día descansan o se relacionan con otros. Antes de dar a luz las leonas se apartan del grupo durante unas semanas. Viven en territorios de entre 26 a 226 km2.
Los tigres, al contrario, en la naturaleza permanecen solitarios la mayor parte del año. Los machos y las hembras viven juntos únicamente durante la época de apareamiento. El territorio de un tigre se puede extender de 20 a 180 km2. Son cazadores—su morfología está diseñada para el movimiento (correr, trotar, saltar, trepar, etc.), y también buenos nadadores por lo que viven donde tengan acceso al agua y llegan a nadar distancias considerables. Los tigres se encuentran en grave peligro de extinción.
En cautividad: Junto con los tigres, y otros carnívoros con amplios territorios, los leones son los animales que muestran más niveles de estrés y problemas psicológicos en cautividad. Los métodos de adiestramiento de los leones son particularmente duros y brutales ya que no existen métodos “en positivo” para entrenar a depredadores de estas características. Desde hace décadas los leones son utilizados en la industria del espectáculo como símbolo de poder, fuerza y belleza. ¿Algún ejemplo? El anuncio de la mismísima Metro Goldwyn Mayer que a lo largo de los años ha utilizado varios leones y el spot español de la empresa Generali Seguros “El león de los seguros”.
Lo normal es obligar a varios tigres a vivir juntos y hacerles compartir espacio también con ejemplares de otras especies de felinos. En cautividad estos animales no pueden realizar el ejercicio físico que necesitarían y que harían en libertad. Los tigres en cautividad suelen sufrir estrés, frustración y ser victimas de comportamientos estereotipados.
Así como los leones, son entre los animales “favoritos” de la industria del espectáculo y desde hace varias décadas son utilizados en anuncios y todo tipo de producción audiovisual (podemos pensar en la película americana “Resacón en Las Vegas”). En la naturaleza, jamás un tigre obedecería a las órdenes de un humano y el hecho de que estos animales puedan “actuar” significa que han sido entrenados con métodos antinaturales y violentos.
Para evitar ataques y facilitar su manejo, es frecuente sedarlos, extirparles las garras o cortarles los colmillos. La desungulación es una práctica brutal y dolorosa que consiste en cortarles la tercera falange de cada dedo hasta la articulación, amputando también hueso, nervios, ligamentos y tendones.
El dolor puede ser atroz y crónico para los animales por daños al nervio radial o a las almohadillas y la modificación de su pie puede llevar a anormalidades en su movilidad, problemas de espalda y de articulaciones. Esta extirpación puede incluso afectar la personalidad de los animales, ya sea tornándolos más apáticos como más nerviosos, asustadizos y, por tanto, agresivos. Algunos pasan a defenderse entonces con los colmillos (que también es común arrancar o lijárselos)
También para evitar ataques, es común sedar a los animales. Para que no sea tan obvio que el animal ha sido tranquilizado, y para que pose, en ocasiones se les echa agua a la cara o se les provoca con trozos de carne.
En la naturaleza: Los primates suelen vivir en grupos sociales muy complejos y tienen capacidades cognitivas altamente desarrolladas. Los babuinos y los chimpancés son tal vez las dos especies de primates más utilizadas en producciones audiovisuales. En el caso de los grandes simios, como orangutanes o chimpancés, el problema se ve agravado al tratarse de especies en grave peligro de extinción.
Los orangutanes, que solían vivir en casi todos los bosques de Asia, ahora se pueden encontrar solo en las islas de Sumatra y Borneo. Están amenazados por la caza, la perdida de su hábitat natural y debido a su lento ciclo reproductivo - las hembras de orangutanes, que en libertad suelen vivir unos 45 años, se reproducen cada 7-8 años y llegan a tener un máximo de tres crías en toda su vida.
Los chimpancés viven en grandes grupos de hasta 100 individuaos. Las crías pasan los dos primeros años de su vida en contacto físico casi permanente con sus madres. Su avanzado desarrollo cerebral no solo les ha ayudado a mejorar sus movimientos y a encontrar comida, sino también a desarrollar otras habilidades como la fabricación y manipulación de herramientas. Los primatólogos comparan la inteligencia de los chimpancés con la de un niño humano de 2, 3 ó 4 años.
Se han identificado varios comportamientos complejos en estos animales, tales como la reconciliación, la alianza o el sabotaje. Incluso pueden ser manipuladores y mentirosos. Los investigadores dicen, además, que son seres sensibles y con personalidades distintas y una investigación del Centro de Investigación de Primates de Yerkes (EE.UU.), asegura que los chimpancés son generosos por naturaleza, una cualidad que hasta ahora se creía exclusivamente humana.
De hecho, los chimpancés comparten con los humanos alrededor del 98% de los genes. Tienen conciencia de sí mismos, capacidad simbólica y cultura que transmiten de generación en generación; son incluso superiores a nosotros en algunas habilidades de memoria matemática.
Estos primates tienen una amplia, aunque discontinua, distribución por 25 países del África ecuatorial, desde el oeste de Senegal hasta el este de Tanzania. Su población está disminuyendo rápidamente a causa de la deforestación y de la caza y se encuentran el peligro de extinción. En 1900 existían unos 2 millones de ejemplares mientras que a día de hoy quedan tan solo 150.000 chimpancés en libertad.
En cautividad: Estos animales son de los más utilizados en la industria cinematográfica y en publicidad tal vez debido a su parecido con los humanos y a que sus capacidades cognitivas les permiten llevar a cabo tareas que no resultan posibles a otros animales (¿Quién no recuerda la película de Clint Eastwood “Duro de Pelar”? o el anuncio “Subscríbase a Geo” de la Revista Geo).
Vestidos y obligados a actuar en ambientes humanos, los primates han sido desde hace décadas, victimas de todo tipo de burla y broma (podemos pensar en la película “Resacón parte II ¡Ahora en Tailandia! ” y en la serie de televisión americana “Animal Practice”). Los primates empleados en la industria audiovisual en ocasiones son capturados de su hábitat natural, pero aunque sean nacidos suelen ser separados de sus madres a una edad muy temprana y mantenidos en aislamiento. La vida que llevan en cautividad implica que sufran de una larga serie de problemas psicológicos y físicos.
Varios estudios demuestran que el uso de simios en la industria del espectáculo tiene efectos negativos para la conservación de estas especies e incluso fomenta el tráfico ilegal de los mismos.
En la naturaleza: Las cebras son animales sociales, que, aún en grandes manadas, mantienen pequeños grupos cuyos lazos familiares son altamente duraderos. Sus territorios son de entre 30 a 600 km2. Su reacción de defensa es la huída y cuando se encuentran acorralados, las patadas.
En cautividad: Las cebras también son utilizadas desde hace años en películas y anuncios. Pero su vida en cautividad es muy diferente de la que disfrutan en libertad: se les observa a menudo alojadas en pequeñas cuadras o atadas o en solitario y realizando movimientos estereotipados de balanceo. Por mucho que se parezcan a los caballos, no se trata de animales domesticados sino salvajes. Las situaciones innaturales en las que se encuentran durante un rodaje les provocan además estrés y ansiedad, pero aún así siguen siendo utilizadas en todo tipo de producciones audiovisuales (ponemos como ejemplo el anuncio “Cebraso” de Mixta)
En la naturaleza: En la naturaleza, estos animales son ágiles escaladores y pasan la mayor parte de su tiempo solos y en movimiento en búsqueda de alimentos.
Los osos pardos la especie más utilizada en la industria audiovisual viven en áreas poco habitadas, tranquilas y con escasa presencia humana -habitualmente entre los 1.100 y los 1.800 m. de altitud. Los territorios de estos animales son de entre varias decenas y centenares de kilómetros cuadrados. En general, los osos pardos europeos suelen ser nocturnos o crepusculares, en parte para eludir la presencia del hombre. La actividad diurna de los grupos familiares gira alrededor de la búsqueda de alimento y, en momentos de relativa calma, los oseznos practican diferentes juegos: corren, saltan, trepan, usan ramas, troncos o piedras y luchan. Todos los osos caminan en cuatro patas debido a su tamaño. Pararse y ponerse de pie, es un signo de agresión para un oso.
La hibernación es una de las facetas más populares de la vida de los osos. Para este estado de letargia fisiológica, los osos eligen lugares de vegetación impenetrable y laderas de muy difícil acceso.
En cautividad: En cautividad, los osos suelen mostrar comportamientos estereotipados, sobretodo cuando viven en cercados pequeños y vacíos de estímulos o cuando pasan las noches cerrados en el interior. Necesitarían piscinas para bañarse, estructuras para escalar, investigar y jugar pero es muy complicado ofrecerles todo esto en cautividad. Los osos utilizados en cine y publicidad (¿os acordáis del anuncio de Quechua “Todos necesitamos calor”?) suelen ser “alquilados” también en circos y fiestas privadas.
En la Naturaleza: Las jirafas son ungulados gregarios y pacíficos que viven en grupos de varios individuos y que cubren vastos territorios.
En los Circos: Su enorme tamaño hace su transporte particularmente difícil y domar a estos animales también resulta muy complicado. En cautividad además es extremadamente complejo recrear un hábitat que pueda satisfacer sus necesidades básicas (mucho espacio, altos árboles, etc.). A pesar de todo esto y del fuerte estrés que implica para las jirafas vivir en soledad y obedecer a las ordenes de los humanos, estos animales son empleados desde hace muchísimos años en todo tipo de producción audiovisual (solo para poner un ejemplo, la película americana “Doctor Dolittle”)
En la naturaleza: estos animales son depredadores acuáticos especializados, gregarios y algunas especies viven en grandes grupos. Se alimentan de una variedad de pescado, calamar, crustáceos y estrellas de mar, algunas también comen pingüinos. Todas las especies son muy activas físicamente y nadadores muy rápidos. Las focas de California se sumergen durante 15 minutos a profundidades de 100m. Aunque algunas especies son sedentarias, otras cambian de hábitat según la estación. Todas tienen un comportamiento de juego y exploración muy marcado.
En cautividad: A diferencia de lo que pasa en la naturaleza, estos animales suelen ser obligados a vivir en aislamiento o en parejas y en espacios muy reducidos con un limitado acceso al agua.
Debidos a sus características biológicas, a su comportamiento social altamente desarrollado, a lo inapropiado que resulta para ellos el transporte frecuente así como a sus necesidades especificas de alimentación y espacio, es imposible mantener estos animales en cautividad de manera adecuada para su bienestar. Pero debido a sus capacidades cognitivas y a lo atractivo que resultan para el espectador los “números” con estos animales, se siguen empleando estos animales en películas y producciones audiovisuales (Recordamos la película americana “Andre, una foca en mi casa”).
En la naturaleza: existen más de 10,000 especies de aves en el mundo: desde ejemplares que miden tan solo 5 cm a los que pueden llegar a los 3 metros. Las aves son animales de sangre caliente que tienen alas y son ovíparos. La gran mayoría pueden volar (algunos no, como por ejemplo los pingüinos).
En cautividad: Las aves son empleadas en todo el mundo en producciones audiovisuales de vario tipo. Y su inclusión en cine y publicidad implica grave problemas para el bienestar de estos animales, ya que se les obliga a actuar y a realizar trucos totalmente innaturales para ellos y porque en la mayoría de los casos se les suele trasladar a ambientes muy diferentes de su hábitat natural. Además, cuando no se requiere que las aves vuelen como parte de un espectáculo, se les puede “desactivar” el vuelo a través de dos tipos distintos de mutilaciones. De forma permanente por pinioning que equivale cortarles lo que en un humano sería la mano, o "temporalmente" por un repetido recorte de las alas. Los métodos de entrenamiento de estos animales pueden ser muy variables, pero la mayoría son similares a aquellos utilizados en los animales de circo. A los loros se les puede entrenar a través del castigo o el refuerzo negativo (cuando un pájaro es sometido a estímulos aversivos -que pueden incluir la violencia- hasta que el ave lleva a cabo el acto que se le exige). Estos métodos suelen ser agresivos basados en amenazas y miedo para forzar al animal a cumplir con lo que se les exige. Además, los pájaros también pueden ser sometidos a la privación de alimentos durante horas antes de actuar. Por último, el uso de aves en películas ha tenido como efecto alimentar su demanda como animales domésticos. ¿Un ejemplo? Los búhos de las películas Harry Potter: al verlos en la gran pantalla muchas familias decidieron adquirirlos pensando que iban a ser perfectos animales domésticos y tan solo unos años después llenaron a los centros de rescates ya que les resultaba imposible cuidarles en su casa.
En la naturaleza: Las iguanas son un género de reptiles nativos de zonas húmedas y tropicales de Centroamerica, Sudamerica y Caribe. En su hábitat natural las iguanas viven principalmente a más de un metro de altura en los árboles de bosques tropicales. Son animales que dependen de un ambiente caluroso para digerir su alimento y son estrictamente herbívoras. Son muy sensibles y en libertad, pueden llegar a vivir hasta 15 años.
Las tortugas forman un orden de reptiles y son animales ectodérmicos lo que significa que su actividad metabólica depende de la temperatura externa o ambiental.
Las serpientes son un suborden de reptiles caracterizado por la ausencia de patas y un cuerpo muy alargado.
Se trata de especies de animales extremadamente sensibles a los cambios de temperatura y al transporte y aunque la mayoría de las personas lo desconoce, resulta extremadamente complicado para ellos (en particular para las serpientes) adaptarse a terrarios o peceras y a las barreras que estos implican. ¿Sabías por ejemplo que es frecuente – e ilegal- dislocar las mandíbulas a los cocodrilos para que no hagan daño a las personas con las que tienen que interactuar?
En cautividad: Del transporte y el cautiverio de reptiles derivan altos índices de enfermedades y de mortalidad. Las tortugas no resisten bien a los cambios de temperatura y a las condiciones de viajes y muchas mueren por el camino.
Los reptiles no son animales que se pueden acostumbrar a la vida en cautividad, no deben mantenerse en terrarios o peceras de cristal. En estado salvaje, nunca encuentran barreras transparentes y son incapaces de adaptarse a ellas. En cautividad es frecuente ver a estos animales tratando de escapar como muestra de estrés y a menudo presentan heridas faciales por los golpes que se dan contra el cristal.
En cautividad, reptiles y anfibios sufren altos niveles de estrés y tanto las iguanas como las serpientes suelen fallecer al año de vida. Extraerlas de su hábitat además, representa interrumpir la cadena trófica, poniendo en peligro a muchos otros animales.
A pesar de todas estas problemáticas, estos animales también son utilizados en todo tipo de películas y producción audiovisual. En Agosto de 2010 en el Aeropuerto de Barcelona Volkswagen promocionaba su último coche en una vitrina llena de pitones que se quedarían expuestas a la luz, al ruido y al público durante meses. El responsable de publicidad de la conocida marca de coches afirmaba: “tener serpientes hace que la gente preste atención”.
En la naturaleza: El lobo es una especie de mamífero del orden de los carnívoros. En origen estos animales se podían encontrar en Norteamérica, Asia y Oriente Medio. Actualmente, sobretodo debido a la caza, habitan únicamente una muy limitada porción del que antes fue su territorio. Son animales depredadores que viven en manadas en bosques, montañas, tundras y praderas.
En cautividad: los lobos en cautividad suelen sufrir mucho estrés y ser victimas de comportamientos estereotipados (por ejemplo dar vueltas arriba y abajo en una misma zona).Viven en grupos mucho más reducidos de lo normal y en un hábitat muy diferente de el que tendrían en libertad. A partir de su segundo año de vida, cuando entran en celo, frecuentemente “retan” a su criador y entrenador en el intento de defender su posición jerárquica dentro de la manada.
Estos animales también son utilizados continuamente en anuncios y producciones cinematográficas.¿ Algún ejemplo? El anuncio de Quechua “Todos necesitamos calor” o la películas "El Hombre y la Tierra", "La España Salvaje", "Las Montañas del Lobo", "Pacto con Lobos".
En la naturaleza: En su estado salvaje delfines y orcas viven en grupos muy unidos, se ayudan cuando lo necesitan y cooperan para pescar. Son animales altamente inteligentes que reconocen el mundo que les rodea gracias al uso de la ecolocalización. Suelen nadar entre 95 y 160 km al día y pueden hacerlo a velocidades de hasta 45km/hora, los delfines y 56 km/hora las orcas. Son de hecho animales muy activos que incluso cuando duermen sólo lo hacen con la mitad del cerebro ya que al mismo tiempo siguen nadando. En la naturaleza, los delfines pueden vivir hasta los 50 años y las orcas entre 70 y 90, dependiendo de si se trata de machos o hembras.
En cautividad: En los delfinarios, estos animales viven en grupos artificiales, en un estado de estrés constante que a menudo les torna tan agresivos que resulta necesario suminístrales tranquilizantes. En estos tanques de cemento, sólo pueden nadar en pequeños círculos y se aburren al no tener nada nuevo que descubrir. Los delfines en cautividad suelen morir a una edad muy temprana y en general, su esperanza de vida se reduce a la mitad comparada con la de los ejemplares de libertad. A pesar de todo esto y de los crueles métodos de captura de estos animales, tanto delfines como orcas han sido los protagonistas de muchas películas y series de televisión. ¿Algún ejemplo? La trilogia de Liberad a Willy. y la serie televisiva y la película Flipper. Por cierto, sabías que el exadiestrador de los delfines que actuaban como Flipper es actualmente el más reconocido activista en contra de la cautividad y en entrenamiento de estos animales?