El pasado 14 de julio 2017, se estrenó en todo el mundo, La Guerra del Planeta de los Simios, ultima saga de la famosa trilogía.

A pesar de ser protagonizada por animales, la película, al igual que sus dos entregas anteriores, no ha supuesto la explotación de ningún animal real. De hecho, precisamente los espectaculares efectos especiales son uno de los principales motivos por el que la producción ha sido aclamada por la crítica.

Los simios de esta nueva entrega llegan a la gran pantalla gracias al asombroso trabajo de muchas personas, en primer lugar los artistas de efectos especiales de Weta Digital y los actores humanos debajo del CGI (imágenes generadas por computadora).

Y las buenas noticias no acaban aquí. No sólo la película demuestra de una vez por todas que a día de hoy ya no hace falta utilizar animales en cine y publicidad, sino que además 20th Century Fox se ha asociado con el Instituto Jane Goodall para ayudar a los chimpancés.

Según el doctor Carlos Drews, director ejecutivo del Instituto: “Las principales amenazas que sufren los grandes simios son la caza y el tráfico de vida salvaje. Aunque el uso de grandes simios en la industria del entretenimiento puede estar disminuyendo en algunas regiones, está creciendo en otras. No sólo no hay necesidad de usar chimpancés ni otros grandes simios en dicha industria, sino que es un imperativo moral hallar alternativas. Películas como La guerra del planeta de los simios, que mezclan magníficamente la interpretación de los actores humanos y las imágenes creadas por ordenador, enseñan al mundo un importante avance para los chimpancés y todos los demás animales”.

En definitiva: ¿Qué más podemos pedir? 🙂

Fuente: National Geographic 

 

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